Ligeia

- ¿Cómo operan dentro del mundo globalizado y asimétrico, las corporaciones de los medios de comunicación? ¿La brecha entre países desarrollados y subdesarrollados se reproduce en el circuito informativo? ¿De qué manera?
-El modelo de organización económica, social y política hegemónico a nivel planetario está determinado por lo que podemos considerar una etapa muy particular del sistema capitalista/imperialista. Esa etapa tiene varias características: una de ellas es el nivel de concentración que opera en la estructura económica. Ese esquema se constata también en el ámbito empresario corporativo dedicado a la producción de contenidos para medios de comunicación o mediáticos (telefonías, sitios de Internet, etc.). Pero esa concentración no se da sólo al interior del sector económico empresarial especializado en medios de comunicación, sino que se da al interior del sistema capitalista. Esta concentración que se registra en el capital abocado a los medios de comunicación recibe inversiones ya no solamente entre empresas especializadas en medios de la comunicación sino que se asocia con empresas de otras ramas de la economía (grupos financieros, fondos de inversión, con la industria alimentaria, con la industria bélica, etc.). Entonces, el fenómeno de la concentración corporativa en los medios de comunicación forma parte del fenómeno de concentración económica y financiera, que son las características actuales de la etapa actual del sistema capitalista. Si una de las características del estado actual del sistema capitalista es la concentración presuponemos economías centrales y economías periféricas, por lo que, esta concentración se registra en el sistema corporativo de matriz hegemónica. Es decir, que tienen asiento en las distintas opciones del bloque hegemónico capitalista imperialista: EE.UU., la Unión Europea. Por consiguiente, este mecanismo se reproduce en los países periféricos no solamente a través de la concentración de capitales identificados como locales, sino que esos capitales identificados como locales están entrecruzados con los capitales procedentes de los centros económicos del sistema capitalista. El sistema de concentración empresario que rige en el bloque hegemónico se reproduce en las economías dependientes de las sociedades periféricas y en esa concentración periférica se registra un esquema asociativo ente grupos empresarios de matriz local con grupos económicos y financieros provenientes del bloque hegemónico.

- ¿Cómo se expresa esto en América Latina y, particularmente, en la Argentina?
-En Argentina es un caso clave, ya que hay un puñadito de empresas que manejan los medios de comunicación, que son el grupo Clarín y el grupo Nación, que además están articulados entre sí, cada uno de ellos asociados con esquemas financieros tanto locales como predominantemente extranjeros, con empresas de telecomunicaciones y con el sector financiero bancario y para bancario. Además de estos dos grandes grupos está el grupo Hadad, vinculado a los capitales procedentes del narcotráfico manejado por la adea y el exilio anticubano en Miami con asiento en ciertos circuitos de la economía ilegal en la Argentina.

- ¿Cuál es la perspectiva latinoamericana de lucha contra la concentración?
-La perspectiva de lucha contra los medios de comunicación es la misma perspectiva de lucha política y social contra el modelo. En la medida en que no haya una gran construcción social y política tendiente a modificar de base el modelo que impera en los países periféricos, no habrá cambios en la composición de los medios. Hoy se puede hablar del proceso de revolución bolivariana, del proceso atravesado por Evo Morales en Bolivia, en la medida del éxito y el avance y de la profundización de estos procesos va a haber capacidad política para opera no solamente en los medios de comunicación sino en la base estructural de la economía capitalista/imperialista en su estado actual.En el ámbito de las comunicaciones y en el ámbito de la lucha por las ideas, hay algunos caminos específicos que es la organización de los medios de comunicación en el campo contra hegemónico, pero que para que sobrevivan con carácter estratégico tiene que indudablemente pertenecer a un contexto de organización político social. El caso más concreto es el caso de TELESUR, que pese a su soledad, es una experiencia concreta de batalla en el terreno de las ideas, pero a partir de un proyecto político (porque se necesita sustento económico, sustento financiero, respaldo político, etc.). El mejor antecedente en la historia de los medios es el caso de Prensa Latina, la primer agencia de noticias que en un momento histórico donde las agencias de noticias eran decisivas en la conformación de la agenda informativa, nace para darle la batalla de las ideas en el terreno del periodismo contra las grandes agencias imperialistas. Prensa Latina no es un proyecto comunicacional, sino que es un proyecto periodístico en el marco de un proceso político revolucionario.

– Los llamados medios “alternativos” se caracterizan por intentar realizar otro tipo de construcción simbólica, por tejer lazos sociales, con el fin de alterar la conciencia y el comportamiento social y transformar la realidad: ¿De qué manera influyen en la sociedad?
-Respecto del concepto de medio alternativo, creo que hay una especie de confusión: se le está llamando medio alternativo a un conglomerado de expresiones comunicacionales que aparecen al calor del abaratamiento de los costos tecnológicos como consecuencia del desarrollo de Internet. Es decir, son alternativas al gran desarrollo tecnológico. Ahora, si lo alternativo es, como dicen Natalia Vinelli y Carlos Speroni en su libro de prensa alternativa, toda experiencia comunicacional que se expresa en la lucha social, estoy de acuerdo. Si la alternatividad está determinada por un posicionamiento político, ideológico, Editorial, contrahegemónico, eso es alternativo.

- O sea que las experiencias de comunicación contrahegemónica podrían llegar a contribuir en este sentido...
- Sí, claro. La prensa contrahegemónica, debe tratar de cambiar la correlación de fuerzas dando la batalla por las ideas pero para que realmente se desarrolle como aparato comunicacional de un proyecto revolucionario tiene que inscribirse en la dinámica de una organización de lucha popular.

- ¿Se puede combatir la concentración mediática? ¿Cómo? ¿Dirigiéndose a quién?

-A la concentración mediática se la combate en la lucha política y social. Hay un texto de Lenin que habla sobre la prensa y la literatura donde está claro que la prensa alternativa en el sentido de una prensa contra hegemónica el objetivo que tiene que cumplir es, básicamente, disputar sentido común frente a la prensa hegemónica, tratar de cambiar la correlación de fuerzas dando la batalla por las ideas. Para que realmente esa prensa alternativa se desarrolle como aparato comunicacional de un proyecto revolucionario tiene que inscribirse en la dinámica de una organización de lucha popular.

- La libertad de expresión ¿Existe?
-El concepto de libertad de expresión aislado, como todos los conceptos filosóficos y jurídicos que emanan del pensamiento burgués, tienden a conformarse como una suerte de sumatoria de derechos aislados. La libertad de expresión aislada del contexto histórico no dice nada. La libertad de expresión es la facultad que tendríamos los seres humanos de decir lo que se nos ocurre y eso es una ficción, porque los seres humanos no vivimos en estado de descontextualización histórica sino que somos trabajadores, somos padres, somos hijos, somos alumnos, somos soldados, somos policías, somos docentes, somos víctimas, etc. Es decir, el concepto de burgués de libertad ( ya sea de expresión como de otras libertades) es abstracto. Las libertades y los derechos se tienen que contextualizar y tener contenido histórico. Entonces, hoy, en el marco del sistema hegemónico tal cuál se habla desde el pensamiento burgués, la libertad de expresión, en el mejor de los casos es para un acto de intimidad pero no en cuanto al ser humano como partícipe de un contexto social. Dentro de las prácticas periodísticas hegemónicas los parámetros de la libertad de expresión es la organización empresarial mediática y además es otra polémica falsa porque el periodismo a partir de que es propaganda y de que es parcial, uno puede ejercer un mayor nivel de libertad en la medida en que uno ejerza un periodismo por afuera de las estructuras hegemónicas, entonces, en sentido defendemos la libertad de expresión pero no como algo abstracto sino como un valor de clase. Por ejemplo, yo te tengo que ser muy franco, yo dirijo la Agencia Periodística del MERCOSUR, que tiene una clara intencionalidad editorial declarada pública y explicitada, nosotros definimos a nuestro medio como un medio contra hegemónico y antiimperialista. En A.P.M. no se puede escribir a favor de la estructura imperialista, entonces, alguien que es pro imperialista podría decir que A.P.M. le viola la libertad de expresión, en ese sentido abstracto, sí. Pero nos encerramos en una polémica falsa, yo creo que la libertad de expresión existe en el soliloquio debajo de la ducha porque en cuanto tu expresión se articula en la puja por el poder, no existe. Y no hay periodismo que no se exprese en la dialéctica de la lucha por el poder: para construir poder, para sostener poder, para oponerse al poder, para modificar la correlación de fuerzas del poder, etc. Ni siquiera la información de servicios en el área meteorológica.Yo creo que la libertad de expresión se da en el marco del contexto histórico, en la asunción de clase, en la asunción de su propia parcialidad y desde el pensamiento democrático de base ampliada se propone una libertad de expresión en este sentido.